El título lo llevó a disputar la Recopa Sudamericana 1995 en el Estadio Olímpico de Tokio (sede donde ganó la Intercontinental 1984) contra el campeón de la Copa Libertadores 1994, el Vélez Sarsfield dirigido por Carlos Bianchi. En la Supercopa Sudamericana 1995 empató con el Santos tanto en Argentina como en Brasil, triunfando en los penales como visitante. En ese torneo alcanzó la cuarta posición, camiseta belgica un resultado que lo clasificó a la Copa Sudamericana 2015 apenas seis meses después de haber ascendido.